Nadie duda ya entre la comunidad científica que la Psicología Positiva (PsiPos) basa sus raíces y tiene sus objetivos fundamentados en el conocimiento y la investigación científica. Precisamente por el sesgo de la ciencia psicológica en el estudio de los traumas, los trastornos y las patologías, la PsiPos pretende estudiar también el bienestar y la felicidad de las personas, los grupos y las organizaciones. Realmente el término ya lo encontramos en el libro de Abraham Maslow “Motivation and Personality” publicado en 1954, en donde dedica un capítulo a la psicología positiva. No obstante, el enfoque humanista impulsado por Maslow no está tan fundamentado en la investigación como el nuevo impulso de la aproximación científica de la PsiPos encabezada en Estados Unidos por Martin Seligman de la Universidad de Pennsylvania. En 1998 en su discurso como presidente de la APA (American Psychological Association), el profesor Seligman se propuso desarrollar la PsiPos desde la investigación científica alrededor del mundo para dar respuesta a muchos problemas personales y sociales desde una nueva mirada, que no se focalice en lo que va mal, sino en las fortalezas de las personas, los grupos, las organizaciones y los países y comunidades.
Durante la Segunda Guerra Mundial, los expertos en aeronáutica emplearon mucho tiempo y recursos en analizar los aviones militares que se estrellaban. Hasta que un día, alguien preguntó: “¿Por qué no analizamos los aviones que permanecen en el aire?”. Esta es una metáfora válida para el campo de la psicología positiva aplicada: Se trata de centrarse en los aspectos positivos del comportamiento humano. Podemos entender la PsiPos como una aproximación de la psicología que enfatiza el optimismo y el funcionamiento humano positivo en lugar de centrarse en la psicopatología y disfunción. El objetivo no es remediar los déficits, sino impulsar las fortalezas, pretendiendo comprender y facilitar la felicidad y el bienestar psicológico.
En parte como consecuencia de este movimiento hacia el estudio científico de lo positivo, existe cada vez mas evidencia empírica de cuáles son los rasgos y características que hacen que unas personas estén más satisfechas con su vida que otras, que tengan mayores niveles de bienestar psicológico, estilos explicativos más optimistas de sus circunstancias, cuáles son los factores que facilitan que una persona, grupo u organización funcione de manera positiva bajo condiciones de estrés o crisis (resiliencia) o que incluso salgan fortalecidos después de un trauma/crisis (crecimiento post-traumático), o cuáles son las prácticas saludables que ponen en marcha las organizaciones que hacen que sus trabajadores y equipos sean mas saludables y resilientes y como consecuencia mejores sus niveles de desempeño y calidad del servicio.
Y en nuestro país no nos quedamos atrás respecto al auge científico de la PsiPos; de hecho, esta ha llegado para quedarse. Sé que es una afirmación contundente pero la siento de esta manera. Y no solo es un sentimiento, sino que puede apreciarse en la gran cantidad de hallazgos científicos que se van acumulando en los últimos años. Revistas de alto impacto científico como Health and Well-Being (factor de impacto 2.30), Journal of Happiness Studies (1.77), The Journal of Positive Psychology (1.2) y Journal of Positive Behaviour Interventions (1.169) son algunas revistas científicas que publican sistemáticamente artículos sobre psicología positiva, además de otras revistas de carácter no específico que publican también. Además existen ya en muchos países asociaciones científicas sobre psicología positiva: En nuestro país, destacar la Sociedad Española de Psicología Positiva; a nivel europeo la European Network of Positive Psychology; y a nivel internacional la International Positive Psychology Association.
Carmelo Vázquez, anterior presidente de la Sociedad Española de Psicología Positiva, dijo al finalizar la introducción del primer boletín de la sociedad que “En buena medida, la PsiPoS será lo que queramos, entre todos, que sea”. Y así está siendo. En nuestro país ya se han celebrado dos congresos nacionales: el primero en 2012 en El Escorial, y el segundo en 2014 en Oropesa del Mar. Los dos congresos fueron éxitos no solo por la calidad de los trabajos presentados, sino por la pasión que investigadores y profesionales de la PsiPos derrochamos día a día. El tercer congreso nacional se celebrará en Baeza (Jaén) en primavera de 2016. A modo de recordatorio, también se celebró con gran éxito en 2013 las I Jornadas de Psicología Positiva en Murcia, celebrándose las próximas II Jornadas en Barcelona, los días 20 y 21 de Noviembre 2015.
Pero no solo eso, la calidad científica de las publicaciones de los investigadores españoles en PsiPos merece más que respeto. Se han defendido mas de una docena de tesis doctorales, muchas de ellas con mención europea al doctorado, hemos llevado a cabo la primera edición del Curso de Experto en Psicología Positiva auspiciado por la Sociedad Española en la Universitat Jaume I, y se siguen concediendo proyectos de investigación científica para trabajar en las múltiples aplicaciones de la PsiPos.
Esta tendencia a crecer de la PsiPos como ciencia y como profesión se hace patente también a nivel internacional. Por ejemplo, en el último meta-análisis de Donaldson, Dollwet y Rao (2015) publicado en The Journal of Positive Psychology se señala que entre 1999-2013 se han publicado 1.336 artículos en revistas con revisión por pares, lo cual significa una gran cantidad de investigación científica, siendo a partir de 2008 donde la frecuencia de publicaciones se dispara. Además, durante 2014 y 2015 se siguen publicando a ritmo vertiginoso artículos sobre PsiPos, que seguro están haciendo crecer de manera exponencial las publicaciones en nuestra área.
Como comenta en su artículo Carmelo Vázquez (2012) seguimos teniendo “enemigos” pero se les acaban los argumentos, y los que tenían, van cayendo uno a uno. Ante la evidencia científica poco queda por criticar, sino es para mejorar y acumular conocimiento científico. Este es para mí el reto futuro de la PsiPos: seguir realizando investigación de alta calidad que pueda ser utilizada por los profesionales para mejorar el bienestar de las personas, las organizaciones y las sociedades.
Este texto parece destinado a reforzar todos los estereotipos y críticas que hasta el momento se han planteado sobre la psicología positiva.
– Incapacidad para afrontar la crítica: «Nadie duda ya entre la comunidad científica que la Psicología Positiva (PsiPos) basa sus raíces y tiene sus objetivos fundamentados en el conocimiento y la investigación científica». «Seguimos teniendo “enemigos” pero se les acaban los argumentos, y los que tenían, van cayendo uno a uno». Estas son frases que más que de una académica parecen de una iluminada. Tirando de Google, no cuesta mucho encontrar textos de académicos que discuten los principios de la PsiPos:
http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/j.1467-9752.2008.00646.x/full
http://www.tandfonline.com/doi/abs/10.1080/00461520.2011.610678
– Recurrir a argumentos fútiles. Seligman fue presidente de la APA gracias a sus investigaciones sobre depresión, no sobre PsiPos. Y el ser presidente de la APA no te da automáticamente la razón en nada. El tener tres o tres cientas organizaciones sobre el tema no aumenta el carácter científico de la PsiPos. Los tarotistas también cuentan con gran cantidad de asociaciones internacionales. El que haya revistas especializadas sobre PsiPos tampoco indica gran cosa. Elsevier publica la revista Homeopathy (http://www.homeopathyjournal.net/) y la homeopatía sigue siendo agua edulcorada.
– Se muestra que se desconoce hasta el vocabulario más básico en investigación psicológica. Donaldson, Dollwet y Rao (2015) no han publicado un meta-análisis. Han publicado un recuento de artículos, que está bastante lejos de ser un meta-análisis. Esta incapacidad con la metodología moderna parece ser compartida por otras eminencias de la PsiPos como Fredrickson, quien publica análisis que no entiende, o Seligman, quien publica estudios marcados como de muy pobre calidad.
Con esto no niego que la PsiPos tenga sus méritos. Simplemente, que esto, más que una publicación en un blog de divulgación científica, parece un texto destinado a un dominical, donde un público poco exigente va a dar por bueno lo que se le plantee y no hay por qué esforzarse en la argumentación.
Lamento discrepar Marisa:
http://robertocolom.blogspot.com.es/2011/07/psicologia-positiva.html
http://robertocolom.blogspot.com.es/2012/02/psicologia-positiva-revisitada.html
Saludos, Roberto
Excelente. Detractores y escépticos habrá siempre, desde su respetable punto de vista. Se acumula evidencia científica contundente y práctica profesional de excelencia con resultados contrastables sobre el efecto de la psicología positiva, en general, y aplicada a organizaciones, en particular. Un gran reconocimiento Marisa a tu liderazgo y vanguardia.
He dejado de contar los argumentos ad verecundiam del texto, también me ha parecido ver una falacia ad populum (el recuento de artículos)
Es muy triste tener que recurrir a falacias para defender un campo tan controvertido y eso que los 3 primeros párrafos me han gustado.
En vez de fanfarronear con que la psicología positiva es una disciplina respetable porque está muy consolidada (con cátedras y revistas), deberíais esforzaros en convencer de que está consolidada porque verdaderamente es respetable (mostrando evidencias y aportaciones concretas). Yo todavía no sé muy bien de que va la psicología positiva, lo reconozco y es culpa mía. Bueno, sí sé que un expresidente de la APA fue el principal impulsor, que hay muchas revistas con buen factor de impacto y que en España hacéis un congreso cada 2 años, y que el último fue en Oropesa. De lo que se habla en esas revistas y congresos es de lo que me habría gustado leer aquí.
«…resultados contrastables sobre el efecto de la psicología positiva, en general, y aplicada a organizaciones, en particular.»
Pues a ver esos datos! No puedo evitar acordarme de este sketck de los simpsons:
https://www.facebook.com/video.php?v=590627827632780
Reirse de uno mismo podría ser un buen punto de partida para divulgar. El modo tan torpe de entrar al trapo con el flame de Marino Pérez fue… paradójico. Una oportunidad desaprovechada.
Muy buenas, soy Javi Jiménez, coeditor de Rasgo, y me gustaría comentar un par de cosas.
Empezando por el principio, este post de María Salanova es el primero de una (esperemos que) larga colaboración entre Rasgo Latente y la Sociedad Española de Psicología Positiva. Nuestra intención es desbrozar el estado de opinión que se ha instalado en los últimos meses/años en torno a la Psicología Positiva dando la palabra a los investigadores y profesionales del campo.
Y este post se enmarca en ese eje: es una presentación de la Presidenta de la SEPP sobre los temas que se van a desarrollar en detalle a lo largo de los próximos meses. Así hay que entenderlo y pedimos disculpas por no haberlo expuesto antes evitando este malentendido.
Como bien sabéis, la redacción de Rasgo Latente tiene a gala su trabajo permanente para aunar divulgación de calidad y excelencia científica. Es por eso que recurrimos a una primera espada de la Psicología Positiva española como María Salanova, para desarrolla este proyecto. En este sentido, nos comprometemos (y la SEPP con nosotros) a mantener nuestra línea editorial.
Por otro lado, también me gustaría hacer una llamada a mantener las más elementales normas de cortesía en internet. No vamos a permitir que Rasgo Latente se convierta en un lugar incompatible con el debate sano y respetuoso. Aspiramos a convertir los comentarios en una extensión de las entradas del blog en todos los sentidos. Aspiramos a comentarios interesantes, incisivos y enriquecedores que contibuyan a que la ciencia psicológica y el debate público sean mejores.
Y en esa aspiración dependemos de vosotros, de la alucinante comunidad que os vais agrupando en torno a RL.
Vayamos a por ello.
Esperemos que la serie de post aporte algo más que la conferencia divulgativa de Salanova que acabo de ver por youtube porque oh dios mio. Pseudociencia a todo trapo acompañada de citas de Bernabé Tierno, Einstein, Ghandi, Darwin (sin entender la teoría de la evolución en sentido moderno), Martin Luther King… la diferencia con cualquier libro de autoayuda me ha parecido nula la verdad.
Un saludo
Sólo un comentario respecto de la anécdota que se menciona relativa a la Segunda Guerra Mundial:
«Durante la Segunda Guerra Mundial, los expertos en aeronáutica emplearon mucho tiempo y recursos en analizar los aviones militares que se estrellaban. Hasta que un día, alguien preguntó: “¿Por qué no analizamos los aviones que permanecen en el aire?”»
En realidad la anécdota es al revés. Los aeronáuticos buscaban en los aviones que regresaban información sobre cómo reforzar su blindaje y para ello analizaban las zonas con más impactos de bala provenientes de las baterías antiaéreas enemigas.
La anécdota – que me parece muy buena y por eso me permito hacer la corrección – fue que un matemático húngaro llamado Abraham Waldles les razonó que:
1) la posibilidad de que una batería antiaérea impacte en una u otra zona de un avión es aleatoria
2) si en los aviones que regresan hay un claro patrón de zonas impactadas por disparos esas zonas no indican partes del avión que deben ser reforzadas con blindaje sino lo contrario: partes del avión qué son capaces de resistir los disparos sin que éste sea derribado. Conclusión: deben reforzarse justamente las otras zonas pues han recibido disparos y los aviones que recibieron disparos en ellas nunca regresaron.
Yo personalmente le veo más relación con el pensamiento lateral que con el pensamiento positivo y en cualquier caso con una comprensión íntima de la estadística.
http://www.cookingideas.es/blindaje-estadistica-20110921.html